Revista invi N°32, Noviembre 1997, Volumen 12: 1 a 2
EDITORIAL
La vivienda es el lugar donde las personas permanecen mayor cantidad de tiempo en relación con otros lugares a los cuales suelen acudir cotidianamente, como ser al del trabajo, del estudio, etc.. Es razonable, por esto, conceder una especial importancia a la calidad del hábitat residencial, donde no sólo vivimos los adultos, sino que además, constituye el marco físico-ambiental en el que crecen, se educan y se forman nuestros hijos y menores en general.
La vivienda es un hábitat que tiene una gran incidencia en la formación de las personas y les graba un sello indeleble en su carácter, en sus hábitos y forma de comportarse.
Estas razones explican y justifican el que la mayoría de las universidades incluyan de alguna manera el tema de la vivienda en las currículas de las carreras de arquitectura, sociología, psicología, construcción, asistencia social, etc., en sus estructuras y funciones académicas propias de la Universidad.
Probablemente, esta acción universitaria ha influido en las motivaciones e interés intelectual de los estamentos académicos, despertando en ellos impulsos de salir a los extramuros de las aulas, buscando relaciones más amplias, interuniversitarias e internacionales. Así puede explicarse la iniciativa de algunos académicos argentinos y uruguayos, visionarios, de crear una organización de académicos dedicados a intercambiar conocimiento y experiencias en vivienda, como también comprometer pasantías, estadías y visitas recíprocas.
La iniciativa plasmó con la creación de una Red Universitaria Latino Americana de Cátedras de Vivienda con académicos argentinos y uruguayos, realizándose un primer encuentro el año 1995 en Mendoza y un segundo al año siguiente en Montevideo, e incorporándose a ella numerosos académicos chilenos, y despertando interés simultáneamente también, en Paraguay, Brasil, Colombia y México.
Los días 2, 3 y 4 de Octubre recién pasado del presente año, tuvo lugar el Tercer Encuentro en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile, comprobándose el avance de importantes labores realizadas y acordándose nuevas tareas para el futuro.
Al término del Encuentro y en elección de plenarias, recibí con sorpresa la nominación para asumir el cargo de Coordinador General de la Red, reemplazando a la distinguida antecesora y Licenciada Sra. Mercedes Lentini de la República de Argentina, quién lo ejerció en forma destacada durante tres años ininterrumpidos.
La designación con que la Red me ha distinguido en esta oportunidad, confiándome el ejercicio de tan importante cargo, la asumo con modestia y decidida voluntad de volcar la máxima capacidad personal y académica que esté a mi alcance, en el ánimo de contribuir fielmente al cumplimiento de los principios e ideales que dieron origen a esta auspiciosa organización.
Varios académicos adscritos a la Red han iniciado una colaboración con artículos, a la edición de nuestro Boletín, el que les fue anteriormente ofrecido como instrumento para llevar adelante sus necesidades de publicación; lo cual no impide manifestarles nuestros más considerados agradecimientos por su aporte.
Así es como en este número tenemos el agrado de publicar un artículo sobre "Las preferencias del usuario y reconocimiento de lo propio en la Arquitectura de Chile Central" de la Arquitecta Ana Rugiero, conformado en base a resultados de una investigación donde analiza los significados que los usuarios asocian a obras arquitectónicas reales de las ciudades de Chile Central. Otro artículo sobre la "Tecnología - Trabajo y paz social" del Arquitecto Horacio Berreta, en el que se refiere a la creciente brecha observable entre los países desarrollados y los subdesarrollados, donde los primeros difunden tecnologías derivadas de principios que resguardan sus intereses e inundan los mercados de los segundos, contraviniendo una realidad distinta. Otro con un estilo dramatizado se refiere a una supuesta "Reunión... Dimes y diretes sobre participación y concertación en la definición de políticas públicas" del Arquitecto Félix Bombarolo, donde desarrolla una visión crítica sobre los conceptos de participación en los
planes y programas habitacionales, interpretando los puntos de vista de los diferentes agentes que intervienen. Un cuarto artículo sobre los "Modelos de gestión en la producción del hábitat" de la Arquitecta Ana Dantur, en que expone los cambios que se producen en la construcción del hábitat, a partir de las paulatinas adaptaciones nuevas por las que atraviesa la Provincia de Tucumán y la Argentina. Un último artículo sobre "Qué dicen los alumnos del proyecto de vivienda" de los arquitectos Dardo Arbide, Elsa Cardacci y Ana Giffre, donde se aborda ciertos aspectos de la práctica del Proyecto de Vivienda, para indagar en el tratamiento del tema a lo largo de toda la Carrera de Arquitectura.
Deseamos que el contenido de este número satisfaga los intereses de nuestros lectores y podamos continuar contribuyendo al conocimiento en vivienda y fortaleciendo los lazos internacionales, especialmente de la Red Universitaria Latino Americana de Cátedras de Vivienda, a la que propiciamos un futuro promisorio.
ORLANDO SEPULVEDA MELLADO
Director (r) Boletín del Instituto de la Vivienda
Coordinador General de la Red Universitaria Latino Americana de Cátedras de Vivienda.